Por Peng Chi Ming
El cambio climático ha afectado enormemente a países de todo el mundo. Como miembro de la comunidad internacional, Taiwán también enfrenta serios desafíos en esta área. En los últimos años, hemos sido testigos de la sequía más grave en un siglo, lluvias intensas y tifones devastadores.
El presidente Lai Ching-te está promoviendo cinco estrategias clave para una transición neta cero. Se trata de iniciar una segunda transición energética; acelerar el desarrollo de fuentes de energía renovables como la geotérmica, el hidrógeno, la biomasa y la energía oceánica; impulsar una doble transformación digital y ecológica de nuestras industrias y dar forma a estilos de vida con emisiones netas cero. Por tanto, estamos presionando hacia una transición justa que no deje a nadie atrás.
En junio, Taiwán estableció el Comité Nacional de Cambio Climático dependiente de la Oficina del Presidente para abordar la gobernanza climática y la cooperación internacional desde la perspectiva del desarrollo nacional. El comité se centra en siete áreas: caminos hacia el cero neto, diversas tecnologías de energía verde y reducción de carbono, la doble transformación verde y digital, estilos de vida verdes sostenibles, una transición justa, finanzas verdes sostenibles y una patria sostenible y resiliencia adaptativa. El comité permite una mejor comunicación de la respuesta del gobierno al cambio climático, acelera la implementación de políticas y mejora la participación pública.
Taiwán está tomando muchas medidas para abordar el cambio climático. En una demostración de compromiso con la reducción de emisiones, ha incorporado el objetivo de emisiones netas cero para 2050 en la Ley de Respuesta al Cambio Climático. Mientras tanto, se ha completado la legislación para establecer un sistema de tarifas de carbono, similar a un impuesto global al carbono, que entrará en vigor en 2025. Las empresas comenzarán a presentar informes de prueba a mediados de 2025 a una tasa estándar inicial de aproximadamente 10 dólares estadounidenses por tonelada de carbono. equivalente de dióxido (tCO2e). La tarifa estará sujeta a aumentos graduales basados en las recomendaciones del Comité de Revisión de la Tarifa del Carbono y, para 2030, alcanzará un nivel que refleje los estándares internacionales de entre 40 y 60 dólares por tCO2e.
Taiwán también se ha comprometido a lanzar un sistema de comercio de emisiones en los próximos cuatro años que lo integrará aún más con los mercados globales. Estas políticas se alinean con el artículo 6 del Acuerdo de París, que fomenta la colaboración internacional en materia de acción climática a través de mecanismos de mercado como la fijación de precios del carbono para alcanzar objetivos climáticos más ambiciosos.
La tarifa al carbono es sólo el primer paso en el sistema de fijación de precios del carbono de Taiwán. A continuación, Taiwán lanzará tres fondos importantes para estimular el desarrollo de industrias verdes. Se establecerá el Fondo de Crecimiento Verde de NT$10 mil millones para fomentar el crecimiento de las industrias nacionales emergentes netas cero. La financiación de los sectores financiero y de seguros respaldará el Fondo de Innovación de Finanzas Verdes para inversiones a largo plazo en industrias de ahorro de energía, emisiones netas cero y recursos circulares.
Finalmente, el Fondo Taiwan Net-Zero trabajará para cumplir los objetivos nacionales e internacionales de reducción de carbono asociándose con industrias nacionales con uso intensivo de emisiones, empresas de capital de riesgo e instituciones financieras para evaluar e invertir en diversas tecnologías de reducción de carbono. Este fondo también incorporará a las empresas líderes de Taiwán a estrategias globales de reducción de carbono, acelerará las iniciativas netas cero y atraerá una mayor inversión verde. Tales medidas mejorarán la competitividad internacional de Taiwán, están en línea con el Artículo 9 del Acuerdo de París, que exige a los países desarrollados movilizar financiamiento climático de diversas fuentes, y sentarán una base sólida para el desarrollo sostenible de Taiwán.
En términos de adaptación, Taiwán lanzó su último Informe científico nacional sobre el cambio climático En Mayo. Este informe proporciona datos científicos fundamentales para que los gobiernos y ministerios locales los utilicen en la planificación de la adaptación a corto y mediano plazo. Aborda el desarrollo de mecanismos de alerta temprana y monitoreo de sistemas para mejorar la resiliencia ambiental urbana. Se establecerá un sistema de prevención de desastres multinivel que incorpore medidas de predicción, respuesta y recuperación de desastres para mejorar las capacidades de respuesta a desastres y construir una nación que sea resiliente gracias a la prevención integrada de desastres, la adaptación y los objetivos netos cero. Esto se alinea con el artículo 7 del Acuerdo de París, que llama a todas las partes a promover e implementar políticas de adaptación. Taiwán seguirá utilizando sistemas de alerta temprana y medidas de seguimiento para perfeccionar las políticas nacionales de adaptación.
Como economía importante y centro de innovación tecnológica, las capacidades de Taiwán en energía renovable, adaptación al clima e innovación tecnológica con bajas emisiones de carbono pueden ser de gran ayuda para la gobernanza climática global. La innovación y la implementación serán impulsores críticos de la acción climática. Con la llegada de la fijación del precio del carbono y la promoción de tecnologías innovadoras relacionadas, Taiwán participará en la acción climática global a través de políticas y sistemas internos mejorados. Esperamos que la comunidad internacional reconozca que Taiwán está dispuesto y es capaz de contribuir a los esfuerzos globales contra el cambio climático.